Situaciones urgentes en niños/as con patología neurológica. ¿Cómo actuar?
Tras el taller realizado en la escuela CIRON sobre situaciones de urgencia en niños/as con patología neurológica en esta entrada del blog vamos a describir cuales son las situaciones más comunes y unos tips de cómo actuar ante ellas.
Obstrucción de la vía área.
¿Por qué ocurre?
• Disfagia.
• Dificultad para coordinar tragar y respirar.
• Reflujo o mala posición.
¿Qué signos de presentación y alarma debemos tener en cuenta?
• Parcial: El niño puede toser.
• Total: Dificultad respiratoria progresiva, tos no efectiva, cianosis e imposibilidad de emitir ningún sonido
¿Qué hacer?
• Tos eficaz (audible) debemos animar o dejarlo toser
• Con tos ineficaz (inaudible o ausente) deberemos realizar Maniobras de desobstrucción (golpes interescapulares y compresiones en el lactante o maniobra de Heimlinch).
• Si está inconsciente debemos llamar al 112 y seguir el siguiente algoritmo:
Aspiración sin obstrucción de vía aérea.
¿Qué síntomas podemos observar?
• Tos o ahogo leve durante o después de comer.
• Aumento de secreciones o ruidos respiratorios.
• Fiebre o tos persistente en días posteriores.
¿Qué debemos hacer?
• Colocar al niño incorporado o de lado.
• Permitir que tosa o expulse.
• Limpiar secreciones si lo precisa.
• Observar respiración y color.
• Consultar si aparece fiebre, dificultad respiratoria o saturación baja.
¿Qué NO hacer?
• No golpear la espalda si respira y tose.
• No ofrecer líquidos ni alimentos de inmediato.
Obstrucción/aspiración de la vía aérea
Es muy importante la prevención, y para ello ¿Qué podemos hacer?
• Asistir a logopedia.
• Postura correcta para alimentación.
• Texturas adaptadas y supervisión directa.
• Evitar comidas con distracciones.
• Otros métodos de alimentación.
Crisis epilépticas
Tipos de crisis más frecuentes:
• Tónico-clónicas:
• Pérdida de conciencia, rigidez, movimientos de sacudidas, cianosis, relajación de esfínteres.
• Focales: movimientos involuntarios de partes del cuerpo con o sin alteración de conciencia.
• Ausencias: desconexion breve, mirada fija...
¿Qué hacer?
• Posición lateral de seguridad. Proteger cabeza. No meter nada en la boca. Vigilar duración. No sujetar.
¿Cuándo es una urgencia grave?
• Si dura más de 5 minutos, si hay varias seguidas sin recuperación o no recuperación de conciencia.
• Debemos acudir a urgencias si: Crisis prolongada o repetida, no recupera conciencia o respira mal, primer episodio o golpe en la cabeza.
¿Qué hacer ante la urgencia?
• Posición lateral de seguridad.
• Proteger cabeza.
• No meter nada en la boca.
• Vigilar duración.
• No sujetar.
¿Tengo disponible tratamiento? Siempre pautado por su neuropediatra
• Midazolam bucal o IM
• Diazepam rectal
• Administrar a los 3/5 minutos o en el tiempo que se haya pautado.
Trastornos no epilépticos
• Episodios bruscos que imitan crisis, pero no son epilépticos.
• Ejemplos:
• Posturas anómalas breves.
• Sobresaltos, episodios de susto o risa.
• Crisis de pánico o apnea emocional
• Distonías paroxísticas o movimientos por dolor.
¿Qué hacer?
• Mantener la calma y observar.
• Registrar vídeo si posible.
• No administrar medicación de rescate salvo duda razonable.
• Consultar con su neuropediatra
Traumatismos y fracturas
¿Por qué son frecuentes?
• Espasticidad, caídas o movimientos involuntarios.
• Fragilidad ósea por inmovilidad o medicación.
¿Qué observar?
• Dolor, hinchazón, deformidad o rechazo al movimiento.
• No manipular en exceso.
• Si hay deformidad evidente inmovilizar y acudir a urgencias.
• Traumatismos craneales con alteración de conciencia, vómitos repetidos, irritabilidad, somnolencia
¿Cómo prevenir?
• Acudir a fisioterapia y realizar ejercicio físico adaptado.
• Asegurar entornos seguros (colchones protectores, barandillas).
Cambios en el nivel de conciencia
Causas:
• Crisis prolongadas o poscrisis.
• Fiebre, infección, deshidratación o efectos de medicación.
• Aspiración o dificultad respiratoria.
¿Qué hacer?
• Valorar si responde, si respira y si el pulso es normal.
• Colocar de lado si no responde.
• Llamar al 112 si respira mal o cambio de coloración.
¿Qué no hacer?
• No intentar dar líquidos ni medicación por boca si no está completamente despierto.
Signos de alarma
• Pupilas desiguales, somnolencia profunda, movimientos anómalos persistentes.
Hipertonía y crisis de distonía
Situaciones que pueden desencadenarlas:
• Dolor, fiebre, infección, estreñimiento o retención urinaria.
• Estímulos intensos (ruido, luz, manipulación).
• Suspensión o irregularidad en la medicación antiespástica.
¿Qué hacer?
• Colocar en una posición cómoda y segura (evitar forzar movimientos).
• Comprobar posibles factores desencadenantes.
• No administrar medicación extra sin indicación médica.
• Si duración prolongada o interfiere con la respiración o la alimentación → acudir a urgencias.
La prevención es esencial:
• Cumplir la medicación pautada y evitar olvidos.
• Fisioterapia regular
• Control de dolor, estreñimiento e infecciones.
• Mantener rutinas y entorno tranquilo.
Fiebre
¿Qué hacer?
• Controlar la temperatura (antitérmicos habituales).
• Mantener buena hidratación.
• Evitar exceso de abrigo.
• Observar comportamiento y respuesta.
Acudir a urgencias si:
• Fiebre > 48–72h.
• Convulsiones prolongadas o muy repetidas.
• Disconfort excesivo o espasticidad, somnolencia excesiva, respiración difícil o aspecto general malo.
Infecciones respiratorias
¿Por qué son más frecuentes?
• Dificultad para toser o eliminar secreciones.
• Reflujo y microaspiraciones.
• Escoliosis o debilidad muscular respiratoria.
Signos de alarma:
• Aumento de secreciones o dificultad para manejarlas.
• Aumento del esfuerzo (retracciones, quejido, respiración más rápida, ruidos).
• Tos débil, fiebre persistente, coloración azulada o palidez.
• Menor tolerancia al esfuerzo o más sueño del habitual.
• Acudir de urgencias si cianosis, dificultad respiratoria, decaimiento, mal estado general.
¿Qué hacer?
• Mantener buena hidratación
• Uso de aspirador o dispositivos de tos asistida si están indicados.
• Elevar el cabecero al dormir.
• Nebulizaciones si están pautadas.
¿Cómo prevenir?
• Vacunas al día (gripe, VRS, neumococo).
• Lavado de manos y evitar contacto con resfriados.
• Fisioterapia respiratoria regular.
• Mantener buena higiene oral
Deshidratación y vómitos o diarrea
¿Por qué?:
• Más riesgo de deshidratación
• Menor superficie corporal, no sensación de sed, disfagia o escasa ingesta.
Signos de deshidratación (boca seca, menos orina, decaimiento).
¿Qué hacer? ofrecer líquidos fraccionados, sueros de rehidratación oral.
¿Cuándo acudir?
• Vómitos repetidos, rechazo de líquidos, signos de deshidratación, somnolencia o afectación del estado general.
¿Qué se puede hacer en urgencias?
• Medicación antiemética y rehidratación oral.
• Rehidratación intravenosa.
Dolor o disconfort
¿Por qué?
• En niños no verbales, el dolor se expresa con llanto, irritabilidad, cambios de tono o sueño.
Causas:
• Fiebre o infección, retención urinaria, estreñimiento, reflujo, contractura dolor articular, luxación de cadera.
Estrategia de observación:
• Cambios de postura, alimentación o sueño.
¿Cuándo consultar en urgencias?
• Dolor persistente sin causa aparente o rechazo de movilización, llanto inconsolable…
Errores con la medicación
Olvido de dosis:
• <2h del horario → administrar la dosis.
• Cerca de la siguiente → saltar y continuar pauta normal.
• No duplicar.
Sobredosis o confusión:
• No provocar el vómito.
• Llamar al Instituto de Toxicología (91 562 04 20) o acudir a urgencias.
• Llevar el envase o nombre exacto.
• Vigilar somnolencia, vómitos, ataxia o respiración lenta.
Prevención:
• Pastillero semanal, lista visible de medicaciones.
• Comunicación clara entre cuidadores (mejor por escrito).
Botón gástrico o sonda nasogástrica
¿Qué hacer?
• Si se sale accidentalmente el botón (introducir sonda temporal o acudir en <1–2 h para evitar cierre del estoma).
¿Cómo prevenir?
• Limpieza diaria y vigilancia de enrojecimiento o secreción.
¿Cuándo consultar?
• Sangrado, salida del contenido gástrico, dolor local o fiebre.
• Llevar siempre repuesto de botón o sonda.
¿Cuándo acudir a urgencias y cómo prepararse?
Acudir si:
• Crisis muy largas o muy repetidas.
• Somnolencia o dificultad respiratoria.
• Fiebre persistente o mal estado general.
• Atragantamiento, cianosis o aspiración.
• Sospecha de fractura o dolor intenso
• Ingesta accidental de medicación.
• Salida de botón gástrico o sonda nasogástrica.
Prepararse:
• Listado de medicación e informes médicos.
• Medicación habitual y de rescate disponible.
• Contactos de referencia y plan de urgencias.
Cuidados preventivos y planificación del entorno
¿Por qué?
• Ayuda a reducir las urgencias y mejora la calidad de vida familiar.
• Revisiones periódicas: neuropediatría, CPP, digestivo, neumología…
• Terapias preventivas (fisioterapia, logopedia, ejercicio físico…).
• Adaptaciones del hogar (evitar caídas, posturas inadecuadas).
• Tener una “mochila de urgencias” con medicación de rescate e informes médicos.
• Importancia del plan de actuación escrito (plan de crisis o de urgencia).
Apoyo emocional y autocuidado familiar
• Los padres de niños con patologías neurológicas viven situaciones de estrés constante.
• Es importante reconocer el valor del cuidador principal.
• Buscar redes de apoyo (asociaciones, trabajo social, psicología).
• Normalizar pedir ayuda y descansar.
“Cuidar al cuidador también es cuidar al niño.”
El debemos remarcar unos MENSAJES FINALES de gran importancia
• Conocer la enfermedad y su manejo da seguridad.
• Actuar con calma marca la diferencia.
• La preparación (informes, medicación actual, contacto del neuropediatra) ahorra tiempo.
• Las familias sois parte esencial del equipo terapéutico.
“Los padres son los que mejor conocen el estado de su hijo”.
“Ante la duda, consultar siempre.”
Dr. Mario Urbano
Neuropediatra